EAU25: El impacto del cáncer en la salud mental – puntos clave

En EAU25, la sesión “El impacto del cáncer en la salud mental”, moderada por el Director Ejecutivo de la WBCPC, Alex Filicevas, puso de relieve los desafíos emocionales que a menudo se pasan por alto en las personas que viven con cáncer. La conversación se centró en cómo el miedo, la ansiedad, el aislamiento y la incertidumbre pueden afectar cada etapa del proceso oncológico y en la necesidad de que los sistemas de salud evolucionen para brindar un mejor apoyo al bienestar mental de los pacientes.

Durante el debate, se destacó que el cáncer no es solo un diagnóstico físico; también conlleva una importante carga psicológica. Los sentimientos de angustia pueden influir en las decisiones sobre el tratamiento, la participación del paciente y su calidad de vida en general. A pesar de ello, el apoyo emocional sigue sin ofrecerse de manera sistemática como parte de la atención oncológica.

Uno de los mensajes clave de la sesión fue la importancia de integrar el apoyo en salud mental en cada paso del proceso de atención. Esto incluye crear espacios seguros para el diálogo abierto, ofrecer programas de apoyo entre iguales y garantizar que los pacientes se sientan escuchados y respetados. Se destacaron recursos como el personal capacitado, las iniciativas lideradas por la comunidad y el acceso a profesionales de la salud mental como componentes esenciales de una atención integral.

También se exploró cómo la comunicación desempeña un papel fundamental en la construcción de confianza. Los pacientes a menudo enfrentan incertidumbre médica, y la forma en que se transmite la información puede empoderarlos o, por el contrario, hacerlos sentir aislados. Conversaciones claras y empáticas, así como reforzar el derecho del paciente a buscar segundas opiniones, pueden ayudar a reducir el miedo y la vulnerabilidad.

El aislamiento social durante el tratamiento fue otro de los temas principales. Muchos pacientes afirman sentirse desconectados de sus redes habituales de apoyo, lo que puede intensificar el malestar emocional. El apoyo entre pares y los programas comunitarios se destacaron como formas eficaces de reducir esa sensación de soledad y hacer que los pacientes se sientan acompañados.

La sesión concluyó con una idea compartida: apoyar la salud mental de las personas que viven con cáncer no es opcional, es esencial. Al reconocer las necesidades emocionales e integrar la atención psicosocial en la práctica habitual, los profesionales de la salud y las comunidades de pacientes pueden trabajar juntos para mejorar tanto el bienestar como los resultados de quienes viven con cáncer de vejiga.

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